viernes, 14 de enero de 2011

Familia en riesgo

Mamá no está...


Ante la ausencia de resultados con los diálogos que fuimos sosteniendo con una familia por las demandas de varios vecinos de Villa del Parque y del equipo de salud del CAPS, de violencia familiar, falta de cuidados y otros un poco más serios, se acercaron la abogada del Servicio Local de Protección de los Derechos del Niño, Cecilia Gòmez , la asistente social del CAPS del barrio, Victoria Walas, y el médico comunitario Ricardo Sayar al domicilio. Lamentablemente, otra vez no se encontaba la madre por lo que se intentará pasar a otra instancia más seria para proteger a los menores.

 
La abogada del Servico Local de Protección de los Derechos del Niño y la asistente social del CAPS del barrio con uno de los niños en riesgo




Mientras Victoria fue a jugar y hablar con otros hermanitos, Cecilia sigue dialogando con uno de ellos.
Ricardo saca fotos y también juega

Mejoras en el acceso a Villa del Parque




La presidenta de la Sociedad de Fomento dialoga con Marchetto y el chofer de la motoniveladora.



Por trabajo conjunto de la Sociedad de Fomento de Villa del Parque y el médico comunitario Ricardo Sayar, la cuadrilla municipal encabezada por el Sr. Marchetto, no sólo mejoró las condiciones del acceso sino que, además, "esquinaron" bien la unión de Älvarez Rodríguez con Aconcagua haciéndola bien de 90 º  ya que, en los hechos, era una curva de altísima velocidad, con el consiguiente peligro para los vecinos, sobre todo los más chiquitos. Para los que les gusta el automovilismo, convirtieron un curvón casi penaltado en una chicana. Lás imágenes de arriba son de ayer y las de abajo son de hoy.


La esquina vuelve a ser esquina.

martes, 11 de enero de 2011

Al agua chicos


Este último 6 de enero, estuvieron en la CEC 801 (antiguamente Hogar Feliz), la asistente social comunitaria Alejandra Tintorelli y el médico comunitario Ricardo Sayar. Fueron a revisar a los chicos de la colonia de vacaciones para que puedan ingresar al natatorio del Santa Paula. Entre risas y mucha buena onda, sólo se detectaron un par de casos realmente serios de pediculosis y otros que, con poquito esfuerzo de parte de los padres, estaban en condicones de refrescarse. Desde aquí, aprovechamos para pedir que los chicos más humildes puedan, en un futuro no muy lejano, ingresar a las piletas a la hora que tratamos de ir todos: a la tarde, cuando hace más calor. ¿Quién de nosotros, por más fanático que sea, se mete de mañana? La injusticia es mayor cuando uno de los profes nos cuenta que, en el mismo establecimiento por la tarde, cuando los chicos pagan para entrar, no se es tan estricto con sus revisaciones. O sea: hay un doble standar.